lunes, 14 de septiembre de 2009

Ramón Camaaño














Hace algunos años, cuando empezaba a hacer fotos, mi amigo Felipe de Corcubión me llevó a ver a un fotógrafo que tenia una casa en el pueblo de mi abuelo. Recuerdo que estuvimos hablando con el y nos enseñó algunas fotos. Nos contó ( si no recuerdo mal )como en la guerra civil revelaba en las trincheras. Este verano me estuve fijando en una foto del pueblo que tenia mi abuelo en casa y estoy casi seguro que es la misma que aquí subo en el post. Supongo que la comprarían mis abuelos cuando este fotógrafo tenía estudio en Cee. Subo estos dos retratos que me parecen especialmente buenos. Es una pena que se encuentre su archivo en internet.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Con un poco de suerte surgirá, como en otras ocasiones, un galerista extravagante y ansioso de medallas de ojeador deportivo que nos ofrecerá unas copias castroprietas en un fabuloso local del centro.
Espero que continúe siendo cool recuperar este tipo de trabajos en detrimento de amamantar seres vacíos con gesto de colibrí murciano.
riquicuo